Carta a Drácula
Querido Drácula, Debo decirle que me sorprendió la llegada de su carta, pues no esperaba oír de usted. Me ofendió descubrir que, en un contexto donde uno espera que las cartas de un desconocido tengan un objetivo de coordinar un encuentro o plan, su mensaje contenía tanto odio. Me parece una pena que tenga el alma tan envenenada. Me reconforta saber que no tiene interés en verme, eso dirá buenas cosas de mi persona. Estoy mejor solo que mal acompañado. Cordialmente, John Lennon